En esta ocasión, diseñamos una preciosa cafetería que se encontraba en estado bruto cuando nuestro cliente nos llamó. Al partir desde cero, no estábamos condicionados por nada, lo que facilitó el proceso de diseño.
Al abordar el diseño de esta cafetería, consideramos varios aspectos, como el público al que se dirigiría y los servicios que nuestro cliente deseaba ofrecer. El diseño del local desempeña un papel crucial para impulsar el negocio. Por lo tanto, una de las claves para atraer la atención de los clientes potenciales fue diferenciarnos de la competencia y destacar entre otros negocios del mismo nicho.
Nuestro cliente tiene un estilo muy definido y quería que su local reflejara su esencia en cada rincón. Durante la fase de diseño, consideramos todos los aspectos, incluido el espacio para personas con movilidad reducida. Adaptamos una zona de barra para atender a padres con carritos.
En todo el local, utilizamos colores neutros, elementos naturales como plantas y un hermoso suelo que imita la piedra. También incorporamos toques frescos con lámparas colgantes y microcemento. Como siempre, buscamos aportar calidez mediante la madera y una iluminación cuidadosamente diseñada, adaptada a las diferentes áreas y momentos del día.
Aquí te mostramos cómo estaba antes de que nuestro equipo hiciera magia
Nuestro objetivo era que la fachada fuera sofisticada pero sencilla. Por lo tanto, optamos por una tonalidad blanca y lamas instaladas horizontalmente. Esto proporcionó abundante luminosidad y resaltó toda la fachada y las cristaleras, que se enmarcaron con perfilería negra.
El logo retroiluminado, diseñado con líneas rectas, aportó armonía y una sensación de orden.
El mensaje oculto se encuentra en el lateral de la fachada, simulando un sol y sus rayos. También está retroiluminado, haciendo referencia a la Costa del Sol.
El núcleo central y corazón de la cafetería, es el amplio sofá central con jardinera. Junto a él, mesas, sillas y el techo remarcando esa zona con una moldura y papel pintado en 3D; crean un espacio acogedor para relajarse, merendar y charlar con familiares y amigos. A su vez, todo el perímetro está iluminado con focos empotrados.
Para ello, utilizamos paneles de lamas lacados en color topo, que no solo resaltan esta zona, sino también ocultan la puerta del almacén, y en el centro, unos arcos retroiluminados destacan el logo del local y una frase inspiradora: “El amor puede esperar, el café no”.
Espero que os haya gustado tanto como a nuestro cliente.
Como siempre decimos, creamos el negocio de tus sueños, para que este hable de ti nada más entrar en el.